Con el paso de los años la sexualidad de la mujer ya no es un tabú y podemos hablar de estos temas con normalidad. En la mayoría de los casos la dificultad para alcanzar el clímax en las relaciones sexuales tiene que ver con factores fisiológicos, psicológicos, funcionales o farmacológicos.
Principales motivos por los que las mujeres no alcanzan el orgasmo:
Muchas mujeres a lo largo de su vida sienten falta de estímulos durante sus relaciones sexuales impidiéndoles llegar al orgasmo. A continuación, te mostramos algunos de los principales motivos:
*Experiencias negativas en el pasado: sabemos que el pasado siempre vuelve, pero no debemos permitir que se quede con nosotros para siempre. Si una mujer ha experimentado una situación traumática en el pasado que la bloquea en sus relaciones sexuales, lo recomendable es que pueda compartir con su pareja o amante lo que siente para que pueda ser comprendida y apoyada. Pero si eso es algo que no quiere o puede hacer, es importante que busque ayuda especializada para poder enfrentar el trauma y buscar su bienestar.
Es clave que lo pueda hablar y que pueda recibir asistencia profesional centrada en ella. Hay mujeres que (debido a un trauma) evitan masturbarse y, de hecho, inhiben el deseo sexual por completo. Hay que conseguir que vuelva a reconciliarse con la sexualidad de una forma muy progresiva, dejando un poquito de lado lo sexual para que se habitúe al contacto físico con su propio cuerpo y, poco a poco, que se pueda ir acercando al placer sexual de forma individual y cuando eso ya esté muy consolidado, ir acercando a la pareja.
*Estrés: Se tiene que intentar relajar y disfrutar del momento. Olvidarse del trabajo, de los niños por unos minutos y piensa en lo que está pasando. Hay mujeres a las que les cuesta llegar al orgasmo por pudor o sentimientos de culpabilidad enraizados en una educación muy conservadora. Sin embargo, uno de los principales factores es el estrés con las que llegan al encuentro sexual.
Para que el organismo llegue fácilmente al orgasmo necesita que haya un grado de relajación bastante alto. El organismo puede llegar a sentir deseo y excitación (que son las dos fases previas del orgasmo) con cierto nivel de estrés y de cansancio, pero la fase final del orgasmo sí necesita que estemos relajados.
Y, en parte, ese estrés viene dado por el ritmo de vida de muchas personas, con trabajos exigentes, horarios que cumplir, jornadas laborales lejos de casa, en algunos casos con hijos que atender.
Aunque en esas situaciones algunas mujeres pueden estar tentadas a fingir el orgasmo no solo para que el encuentro sexual no se extienda mucho tiempo sino para no herir el ego de su pareja sexual.
*Falta de comunicación: para disfrutar en pareja ha de haber una buena comunicación y cuando estamos en la cama, más todavía. Conecta con tu pareja comentándole que es lo que más te gusta que te hagan. Decirle qué es lo que realmente te apetece en ese momento.
Quizás hay que partir de la consigna de que en una relación sexual nadie puede adivinar exactamente qué está sintiendo la otra persona. Evidentemente se pueden leer los gestos y los sonidos, pero lo ideal es que se vaya dando feed-back.
A veces la pareja suele durar muy poquito y a ella no le da tiempo de alcanzar el orgasmo. En ese mismo caso es recomendable que la mujer le plantee la situación a su pareja. Es importante tener en cuenta cómo plantearlo. No hacerlo como si se tratara de una crítica o una queja, sino algo para mejorar.
En el tema sexual tanto hombres como mujeres se han llenado de autoexigencias, angustias e inseguridades, por eso es fundamental saber hacer los planteamientos.
*Masturbación inapropiada: hay veces que no se recibe el estímulo apropiado, ya sea por vergüenza o falta de práctica. Una buena masturbación en los preliminares asegura poder llegar al clímax. Hace décadas era más habitual que los roles fuesen más asimétricos, que el hombre buscase su placer rápido, pero eso ha ido evolucionando. El problema no es que se dedique más o menos tiempo a esa fase preparatoria, sino de comunicación.
La clave es que la mujer le explique a la pareja (hombre o mujer) qué hacer, cómo, con qué ritmo y en qué parte de su cuerpo. El orgasmo es responsabilidad de la propia mujer, y en ese proceso de estimulación la masturbación propia también puede ser importante para muchas mujeres, no solo antes del coito como una manera de entrar en la fase de excitación y de humedecimiento de la vagina, sino después.
*Falta de apetito sexual: Es importante conocer a qué se debe la falta de apetito. Un médico podrá recomendar una terapia de reemplazo hormonal si el problema es insuficiencia hormonal. La falta de deseo sexual puede afectar a las mujeres en diferentes etapas de sus vidas. Por ejemplo, durante el embarazo, después de dar a luz, en situaciones de estrés y en la menopausia.
La depresión, los traumas psicológicos, el uso de ciertos medicamentos y los desórdenes hormonales pueden tener un impacto a la hora de tener una relación sexual y, por ende, de experimentar un orgasmo.
¿Cuánto tiempo necesita una mujer para llegar al clímax?
Según un estudio publicado en la revista médica ‘Journal of Sexual Medicine’ ha determinado, con exactitud, lo que tardan las féminas en llegar al clímax durante sus relaciones sexuales. La muestra fue realizada en más 645 mujeres de unos 30 años, heterosexuales y con pareja estable. Los investigadores pidieron a las chicas encuestadas cronometrar el acto durante 8 semanas y el resultado fue que las mujeres tardan 13,46 minutos aprox en llegar el clímax.
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